Alumnos con brillo
Durante el año escolar, el alumno del curso de formación completa tiene por misión la de confeccionar su portafolio. Consiste en reunir 25 trabajos representativos de la labor del año y se presenta al examen final como una de las 5 pruebas, la más representativa de todas. Se valora esta prueba como la más significativa porque se trabaja en el transcurso de todo el año escolar. El maquillador demuestra con ella sus capacidades técnicas y creativas. Es la única prueba que puede indicar en su totalidad las aptitudes del alumno.
Este portafolio es también la herramienta indispensable para lanzarse en el mercado laboral; es la mejor tarjeta de presentación de un maquillador profesional.
En el transcurso del año escolar, la academia organiza unas sesiones en colaboración con un fotógrafo profesional; se trata de eventos que denominamos “sesión Book” en los cuales los alumnos elaboran maquillajes, peinados y estilismos con especial cuidado, con vistas a llenar el Book con lo mejor de lo mejor. Estos trabajos se proyectan en grupo para realizar una corrección que aprovechan todos los alumnos, sea positiva o negativa la crítica.